Transporte para Londres (TfL) ha lanzado una propuesta pública para evaluar los puntos de vista de los clientes sobre la idea de descontinuar el pago de los pasajes en efectivo en todos los autobuses de Londres a partir de 2014..
Este año los pasajes pagados en efectivo equivalen a menos del uno por ciento de los viajes en autobús, lo que supone un descenso del 25% con respecto al año 2000. El pago con tarjeta Oyster o con pagos sin contacto ofrece el pasaje más barato, actualmente una Libra menos que un boleto comprado en efectivo.
Otra ventaja de eliminar el uso de efectivo es que los clientes se beneficiarían con mejoras en los tiempos de espera en las paradas y una reducción de las demoras.
"Mantener el uso de efectivo en los autobuses cuesta alrededor de 24 millones de Libras al años y como son pocos los clientes que pagan de contado, es lógico que estemos considerando eliminarlo", planteó Leon Daniels, gerente de transporte de superficie de TfL. "Ese ahorro podría reinvertirse en otras mejoras para la red de transporte de la capital".
TfL también busca introducir una nueva función en la tarjeta Oyster que permitirá que los pasajeros puedan realizar un viaje adicional en el autobús si no tienen suficientes fondos en la misma, lo que los ayudaría a llegar a sus hogares o a la siguiente estación o al próximo puesto de venta de boletos Oyster (Oyster Ticket Stop).