11 jun 2013

La modernización se apodera de Río de Janeiro

TransBrasil es uno de los proyectos que Río de Janeiro adelanta
de cara a las Olimpiadas (Foto Cidade Olimpica)
Ser anfitrión de eventos como el Mundial de Fútbol puede servir como catalizador para que las ciudades lleven a cabo mejoras de infraestructura y proyectos de renovación urbana. En 1992, Barcelona implementó grandes inversiones en infraestructuras para los Juegos Olímpicos. Como resultado, la ciudad fue capaz de reconstruir su frente marítimo y revitalizar vecindarios enteros.

Rio de Janeiro, que será sede de la Copa Mundial y los Juegos Olímpicos durante los próximos tres años, ha adoptado un enfoque dinámico al emplear las inversiones que se ejectuan en infraestructura para estos eventos y atacar algunos de sus problemas neurálgicos de transporte, medio ambiente e infraestructura social. Por ejemplo, la ciudad está planificando la revisión de su red de transporte público, la adición de 150 kilómetros (93 millas) de líneas de autobuses de tránsito rápido (BRT) y extender las estaciones del Metro para conectar las principales sedes olímpicas con el centro de la ciudad y el aeropuerto internacional. Durante los Juegos Olímpicos, se prevé que las nuevas líneas de BRT resuelvan las necesidades cruciales de transporte entre las principales sedes olímpicas, pero una vez culminado el evento, estas nuevas rutas de tránsito constituirán una mejora clave en algunos trayectos en Río, lo que ayudará a reducir considerablemente los tiempos de viaje para millones de Cariocas.

Renovación de una plaza bajo el proyecto
Morar Carioca (Foto Cidade Olimpica)
Otro de los proyectos emblemáticos de Río de Janeiro es Morar Carioca - una importante iniciativa para mejorar la accesibilidad, la salud, la educación y el medio ambiente en los barrios informales de la ciudad, conocidos como favelas.

A través del proyecto Morar Carioca, Rio ha comprometido 8.000 millones de reales brasileños (3.76 mil millones de dólares) para mejorar las favelas de toda la ciudad, y algunos de los resultados ya son visibles. Un concurso de arquitectura se celebró en 2011, permitiendo a los arquitectos brasileños ofrecen diferentes visiones de cómo las favelas podrían convertirse en comunidades más saludables y sostenibles.

La ciudad ha añadido espacios públicos, incluyendo gimnasios al aire libre públicos y campos de fútbol para mejorar la actividad física y la salud. Cuenta con calles pavimentadas donde se ejecutan campañas de concienciación y de salud pública. También han mejorado la recolección de basura y saneamiento.